Chávez Ornelas comentó que luego de que no le dieron la atención médica, la pequeña fue ingresada a un hospital privado, donde le dieron atención médica, diagnosticándole apendicitis e indicándole que la llevaran a operar en el Seguro Social para que se ahorraran los gastos de dicha operación.

El abuelo de la niña, que tras exigir que le dieran la atención médica a su nieta, el director de la clínica 27 del mineral de Palaú ordenó que fuera detenido por los elementos de Seguridad Pública.

De acuerdo al desesperado abuelo, mientras los agentes municipales lo intentaban arrestar, fue durante la madrugada del 28 de febrero que la sometieron a una cirugía y tras darla de alta, la pequeña seguía con los mismos síntomas.

Mientras el señor J. Dolores estuvo a punto de ser detenido por los elementos municipales, su nieta fue enviada a Nueva Rosita en una ambulancia del hospital.

Por su parte la señora Juana Ivette Chávez Lara, madre de la pequeña, Britany Martínez, señaló que cuando era trasladada al hospital de Rosita, los choferes de la ambulancia le comentaron que el director de esa clínica, puso en la orden de traslado de la niña, que requería la atención médica debido a que presentaba 3 semanas de embarazo.

La angustiada madre de la pequeña Britany señaló que tras la nula atención en las clínicas 27 del Seguro Social, decidió sacarla y trasladarla al hospital privado, donde es atendida por los especialistas, quienes le comentaron, que de no haber sido atendida habría muerto.

“En el hospital, los especialistas, me mencionaron que la operación a la que fue sometida mi nieta, no fue la correcta y le dañaron el intestino, por lo que tuvo que ser intervenida otra vez.