El evento realizado fue un Motozumbaton en el que se escuchaba en una sola voz, el deseo de ayudar a quien por años alejó a los jóvenes de vicios y vandalismo, pues esa era su misión en este paso por el mundo terrenal, apareciendo desde la noticia de su padecimiento, una serie de mensajes de sus alumnos que buscaban alentar a Daniel Garza para su pronta recuperación.

Apenas hacía unos meses que Daniel Garza se mostraba orgulloso de haber forjado a Hedna “La Hielera” Maltos quien logró pelear en Canadá con un triunfo que él señalaba era robado, notándose en su rostro la felicidad de que su esfuerzo como entrenador había dado frutos, sin mencionar a muchos pugilistas más, entre ellos el campeón José “El Potro” Estrada.

Sin duda, este reconocido boxeador será siempre recordado por la población en general dejando un gran legado en este ámbito deportivo, siendo recordado porque en su última pelea en el ring, luchó hasta el último round.