Fue a las 16:00 horas de ayer cuando el párroco Humberto García Badillo, de la Parroquia Nuestra Señora de San Juan, ofició la misa para pedir por el eterno descanso de los caídos y dar consuelo a los familiares, dijo: “Pues el sufrimiento no se acaba, les comento que tenemos que unir sufrimiento con el caminar diario y la oración, no parar de orar, orar, orar”.

El viernes también vamos a estar en el aniversario luctuoso de la villa de Las Esperanzas y pues son momentos tristes, pero unidos a la vida diaria, se convierten en gozo, caminando con la cruz, cada quien con su cruz, comentó el sacerdote.

En relación a la seguridad para los centros de trabajo, sobre todo de extracción de trabajo, dijo: “La lucha constante es de las autoridades, de luchar por que haya condiciones de seguridad, pero ahorita el carbón como nunca pues sigue siendo sacado de entre las entrañas para sobrevivir la gente, ‘sobrevivir’, porque no es lujo como viven por hacer estas labores”.