Recordó la tradición de encender progresivamente las cuatro velas como un rito lleno de simbolismo durante los cuatro domingos de adviento, que representan los largos siglos de esperanza de Israel y la luz del que viene en Navidad como verdadera luz del mundo.

Hizo énfasis en que todo este es un proceso interior que nos lleva a adoptar una actitud receptiva y que, en muchos casos, abarca una exigencia y un cambio de nuestra conducta ante el inminente encuentro con Cristo.

“Se trata de ser más sensibles con el hermano, de no ser indiferentes ante el sufrimiento, podemos hacer mucho por quien nos necesita y todo empieza desde la familia, es allí donde debemos tener cimentados los valores”, recalcó.

Elizondo Cárdenas comentó que la iglesia se prepara a partir del lunes con una jornada de oración, se trata de rezar durante 9 días en familia, el trabajo o desde cualquier lugar con fe, teniendo como alternativa la capilla de Nuestra Señora del Rosario que fue construida hace un año, especialmente para este tipo de celebraciones.

Finalmente agregó que se tendrán misas especiales para el día 24 y 25 de diciembre, con coros y números artísticos que están preparando los diferentes grupos de jóvenes y adultos.