“Este tema es importante para minas de carbón que tiene desprendimiento de gases o que pretenden producir energía eléctrica con gas metano” expresó el director de CIGA.

La planta o estación podrá medir el volumen de gas que se requiere en cada una de las localidades donde se estudie, para que las empresas mineras definan si es suficiente para generar la cantidad de watts horas para el abasto de energía en minas.

Develó que se ha hecho una prueba piloto con un pequeño generador, pero que está en la espera de una convocatoria que emite CONACYT para un fondo sectorial y buscar la manera de participar con un proyecto presupuestado en 60 millones de pesos.

El proyecto consiste en instalar en la Región Carbonífera una planta piloto, que es una mediana instalación portátil para efectuar operaciones, para que se haga una perforación en la tierra y colocar válvulas en el pozo, alimentar la planta y generar energía eléctrica.

La energía eléctrica será medida para saber qué cantidad se genera constante y con la cantidad de gas mínimo o máximo sea suficiente para abastecer de electricidad la mina.

“Vaya, la planta no es una estación grande, porque es como si se efectuara una perforación para un pozo petrolero, en donde se tiene que ademar y proteger las formaciones” explicó el Doctor en Geociencias.

Para la ejecución del proyecto se emplea una tecnología antes usada por grandes empresas mineras en México, pero aquí en la Región Carbonífera se pretende hacer una reingeniería con tecnología de frontera para hacer más eficiente la producción de energía y hacerlo más sustentable además de aprovechar la tecnología de punta para hacerlo económicamente viable.

Finalmente dijo que el objetivo es generar energía eléctrica con el gas metano y con el residuo hacer subproductos como medicinas, refrescos y fijadores de cabello.