El terremoto de magnitud 8,4 en la escala de Richter ha obligado la madrugada de este viernes a las autoridades educativas de México a cancelar clases en diferentes estados del país. El secretario de Educación, Aurelio Nuño, decretó la suspensión de clases en los estados sureños de Chiapas y Oaxaca, en los centrales de Tlaxcala y Puebla, así como en la Ciudad de México (la capital) y Veracruz (Golfo de México).

A través de su cuenta en la red social Twitter, Nuño dijo que esa medida tiene “con el propósito de verificar instalaciones y salvaguardar la vida de los infantes”. La cancelación de clases, añadió, aplica para todos los planteles de preescolar, primaria y secundaria, tanto públicos como privados.

Los primeros reportes apuntan que el movimiento telúrico, ocurrido a las 23:49 hora local del jueves, se sintió en distintos estados del sur y centro del país, además de la Ciudad de México donde se activaron las alarmas sísmicas. El Servicio Sismológico Nacional (SSN) señaló en su informe actualizado que el temblor se registró a 137 kilómetros al suroeste de la ciudad Tonalá, Chiapas, luego de que en su reporte preliminar indicara que tuvo una magnitud de 8,1 con epicentro a 111 kilómetros de Pijijiapan, en el mismo estado. Posteriormente, se registraron al menos 12 réplicas, la más intensa de magnitud 6,1 en la escala de Richter.

El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, se encuentra con autoridades, algunos miembros de su gabinete y funcionarios de Protección Civil en el Centro Nacional de Prevención de Desastres, en la Ciudad de México, para hacer una evaluación general de los efectos del terremoto.